El ANALIZADOR DE LÍQUIDOS FISCHERSCOPE® XAN® está conectado directamente al baño de revestimiento a través de un tubo. Allí, una bomba extrae la solución del baño y la dirige a la celda de flujo dentro del dispositivo de medición.
En la celda de medición el análisis de la solución se realiza mediante medición por rayos X. En este proceso, se envían rayos X de alta energía (la radiación primaria) desde el tubo de rayos X a la muestra. Estos rayos X inciden en los átomos de la solución y los ionizan. Esto significa que un electrón cercano al núcleo se elimina del átomo. Dado que este estado es inestable, un electrón de una capa superior llena el vacío y emite radiación fluorescente. El nivel de energía de esta radiación es como una huella digital, característica del elemento en cuestión.
Un detector capta la fluorescencia y digitaliza la señal. Una vez procesada la señal, se crea un espectro: en el eje x se representa la energía de los fotones detectados y en el eje y su frecuencia, la llamada tasa de conteo. A partir de la posición de los picos en el espectro se pueden identificar los elementos presentes en la solución. La altura de estos picos proporciona información sobre su concentración.
Después de una medición exitosa, la solución se recoge en un tanque de tratamiento de aguas residuales o se devuelve al punto de muestreo.