On the sofa with… Marc Vidal

Marc Vidal – Conferenciante y consultor en Transformación Digital. Analista económico y divulgador tecnológico

MM – La pandemia nos ha obligado a acelerar los procesos digitales en las empresas ¿En qué niveles de transformación digital está el tejido empresarial en nuestro país?

Marc Vidal –El siglo XXI empezó con dos décadas de retraso. En concreto lo hizo en marzo de 2020. Aun no lo percibimos en toda su intensidad, pues se precisa perspectiva para verlo en toda su dimensión. Lo descubriremos en unos años, cuando se estudien las repercusiones en las relaciones laborales, personales, culturales y económicas de todo lo que ha pasado en los últimos meses. Será en el ámbito acerca del puesto de trabajo, que esos cambios habrán sido absolutamente radicales. Algo que, aunque lo parezca, no tiene que ver tanto con el teletrabajo u otras variables tecnológicas, sino con el conjunto de transformaciones que estamos sufriendo precisamente de la mano de esa tecnología y del modo en el que trabajamos con ella. Es mucho más profundo de lo aparente. Por eso el análisis sobre como está ahora mismo ese tejido es complicado de ver. No obstante a veces se nos llena la boca de progresos tecnológico y de nuevas tecnologías pero la verdad es que la aportación a la exportación total española que generan las tecnologías de investigación no llega al 5%. Hay mucho que hacer.

MM – La Inteligencia Artificial está cada vez más presente en nuestros procesos diarios. ¿Es un signo de que estamos viviendo ya la 5ª Revolución Industrial?

M. Vidal –No, la 5a revolución tiene que ver con la singularidad tecnológica, un escenario que aun le queda bastante por llegar. Como mínimo unos 15 años. Aún nos toca pasar lo que se denomina ‘fase neutra’ que se sucede cuando confluye el final de una revolución (la cuarta en nuestro caso) y el inicio de la nueva. Esa fase neutra genera una cierta sensación de crisis en términos laborales y sociales que se superan con el tiempo y mejoran todo. Alrededor de 1870, durante una de las mayores crisis que ha vivido la humanidad, se patentaron la bombilla, el teléfono, el fonógrafo, la red eléctrica y el metro urbano. Volverá a pasar. En todas las cosas que los robots y software nos sustituirán tendrán que ver con la fuerza física o la fuerza bruta computacional ya sea vinculada al cálculo o la inteligencia artificial derivada. De momento mientras llega la singularidad tecnológica, ese momento en el que los robots no nos necesiten para existir y regenerarse, no afectará a la creatividad, al detalle, a la empatía o las relaciones humanas.

MM – La automatización del trabajo ya es una realidad. ¿Cómo crees que serán los trabajos del futuro?

M. Vidal– Algo ha cambiado para siempre. El puesto de trabajo exige una nueva definición. Seguramente, el propio contrato social que denominamos ‘empleo’ vaya cambiando. Por ejemplo, Amazon ha anunciado que permitirá que sus trabajadores tecnológicos y corporativos continúen
trabajando de forma remota de forma indefinida, siempre que puedan viajar a la oficina cuando sea necesario. En definitiva, el nuevo empleo ya no es algo del futuro. El siglo XXI dejó de esperar. Empezó hace poco, pero acelera a una velocidad inédita. Los robots (software y hardware) se irán
incorporando. No sé como será el empleo del futuro sólo sé que nos rodearán todo tipo de máquinas inteligentes. Y eso no será un problema laboral. No perderás tu trabajo en manos de un robot, lo perderás en manos de una persona que se lleve mejor que tú con ese robot.

MM – Respecto a la Industria 4.0, afirmas que no vivimos en una época de cambios, sino en un cambio de época. ¿Cuáles son los principales retos que tenemos por delante?

M. Vidal– Las máquinas son muy buenas respondiendo, pero no tanto inventándose preguntas. Cuando se inventó la calculadora los matemáticos pensaron que estaban muertos y que ya no eran necesarios. Pero no fue así, desaparecieron los calculistas, pero los matemáticos abrazaron el potencial tecnológico de las calculadoras para llegar aún más lejos y sofisticar enormemente sus
ecuaciones y sus preguntas. El talento actualmente ya es el gran valor añadido de las empresas, pero en un futuro inmediato tener a personas con habilidades que no sean automatizables o digitalizables tendrá un valor incalculable. La humanidad tiene ante sí una oportunidad mayúscula:
podemos ser, gracias a la tecnología, aún más humanos. Debemos abrazar la tecnología, ¡porque nos dará tiempo! Tiempo que podremos destinar a ser más humanos, es decir, a hacer cosas propias de las personas y no acciones mecánicas o automatizables que ya pueden hacer las máquinas, ¡ese es el gran reto!. La inteligencia artificial, la robótica, el big data, la tecnología 5G y otras herramientas tecnológicas que están por llegar son todas esas “máquinas” que sitúan a la humanidad ante el gran desafío que implica entrar en la quinta revolución industrial: cómo convertimos el mundo que ahora conocemos en un mundo automatizable, que trabaje para nosotros y que nos permita hacer las cosas que nos distinguen como seres humanos.

MM – El día 17 de noviembre a las 12h estarás en MetalMadrid, Composites y Robomática Madrid participando como Keynote del Congreso, ¿por qué crees que son importantes este tipo de encuentros?

M. Vidal– Es importante porque el conocimiento se adquiere por contacto, conociendo las experiencias de tu competencia, proveedores, potenciales clientes y escuchando a profesionales de otros campos que te acercan otros escenarios económicos. En estos congresos la clave está en estar en beta constante. O sea, el futuro del empleo no sabemos cuál va a ser, se va a estrechar en muchos ámbitos y se va a modificar en otros. Pero lo que está claro es que la única actitud que tú puedes tener sobre eso que viene ahora es la de estar en aprendizaje continuo. Como nos hablan de que vivimos momentos de incertidumbre, tendremos que actuar sobre ello con garantías. Eventos así nos ayudan pues si se analiza detenidamente el momento actual, se pueden descubrir muchas oportunidades para aportar valor a través de transformar los procesos y los modelos. La incertidumbre no es un elemento negativo, sino un valor añadido. Nos mantiene en beta constante, en aprendizaje, y eso es una ventaja. En MetalMadrid, Composites y Robomática Madrid podemos mantenernos en ese punto de aprendizaje y conocimiento. Ese es el valor principal que le veo.

MM – Especialista en Transformación Digital e Industria 4.0, consultor internacional, conferenciante de éxito, escritor… Tú día a día debe ser una locura…, pero, ¿cómo es un día normal en la vida de Marc Vidal?

M. Vidal–Agotador… (risas)

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